Cinco aclaraciones sobre comida orgánica
Consumir comida orgánica es una de las tendencias actuales. Pero muchas personas al ir de compras adquieren productos orgánicos sin saberlo, y otras creen consumir comida orgánica pero no lo están haciendo. A continuación se hacen algunas aclaraciones al respecto.
- La comida orgánica es la misma que la comida natural.
Falso. La comida orgánica es aquella que se produce sin el uso de agroquímicos, pero no necesariamente la comida natural es orgánica. Por ejemplo, una papa pastusa producida con el uso de fertilizantes y pesticidas químicos es natural pero no es orgánica. Cabe anotar además que para que una comida sea orgánica, se debe certificar que el proceso de su producción cumpla con las normas establecidas para que en efecto lo sea. En Colombia, hay algunas organizaciones, como NaturaCert, que certifican fincas en las que efectivamente se produce comida orgánica.
- Cualquier finca puede producir comida orgánica.
Falso. Para que una finca produzca comida orgánica debe implementar buenas prácticas ambientales, de manera tal que dentro de su producción no se contaminen las fuentes hídricas ni el suelo con agroquímicos y se conserven los recursos naturales como la fauna silvestre y los bosques nativos. Este tipo de fincas deben pasar por un proceso de evaluación para ser consideradas como productoras de comida orgánica.
- Es difícil conseguir comida orgánica.
Falso. Algunos supermercados y tiendas especializadas ofrecen comida orgánica certificada. Incluso muchos de estos proveedores cuentan con tiendas online donde se pueden ordenar sus productos. Este tipo de productos por lo general tienen un sello que los identifica orgánicos. De igual forma, algunos pequeños productores que siguen los lineamientos de la producción orgánica venden directamente sus productos.
- La comida orgánica es más saludable.
Verdadero. Los dos principales argumentos para optar por la comida orgánica es que este contiene menos pesticidas y más nutrientes. Los pesticidas químicos son absorbidos por frutas y vegetales, dejando trazas residuales que pueden ser perjudiciales para la salud.
- La comida orgánica es más barata.
Falso. La producción orgánica supone una mayor inversión en mano de obra, control biológico de plagas y fertilización.