Agricultura familiar es clave para sostenibilidad alimentaria
La III Cumbre de la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños (CELAC), celebrada la semana pasada en Costa Rica, deja aparentemente buenos resultados para el sector agropecuario. En especial por lo relacionado con temas de Agricultura Familiar y la aprobación del Plan de Seguridad Alimentaria, Nutrición y Erradicación del Hambre 2025.
Según el criterio del ministro de Agricultura y Ganadería de Costa Rica, Luis Felipe Arauz Cavallini, quien destaca la inclusión de políticas en favor de la producción y abastecimiento de alimentos, “Costa Rica promovió ambas iniciativas de manera decidida, desde la Presidencia Pro Tempore, y por eso estamos muy satisfechos con la inclusión de estos temas en la declaración final, porque además, representa un fuerte respaldo a nuestros agricultores dedicados la producción de alimentos, de manera especial a las familias dedicadas a la pequeña agricultura”.
“Estos acuerdos, además, van en línea con las políticas agropecuarias que nos planteamos en esta administración, las cuales pretenden devolver la dignidad a las familias de las zonas rurales, con acciones que favorezcan la inclusión de jóvenes y mujeres a las actividades del agro, con el debido reconocimiento social y económico, así como el desarrollo de actividades que agreguen valor, conocimiento y nuevas tecnologías”, agregó Arauz.
Qué dice la Declaración Política de la CELAC:
Los temas relacionados con la producción agropecuaria están contenidos en los puntos 17 y 18 de laDeclaración Política de la CELAC, que textualmente dicen:
- Reconocer la contribución directa de la agricultura familiar a la seguridad alimentaria y el desarrollo sostenible en el logro de una región libre de pobreza y del hambre, y acoger la declaración de la I Reunión Ministerial sobre Agricultura Familiar de la CELAC celebrada en Brasilia el 11 de noviembre de 2014.
- Aprobar el Plan de Seguridad Alimentaria, Nutrición y Erradicación del Hambre 2025 de la CELAC, y agradecer a la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO), la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (CEPAL) y la Asociación Latinoamericana de Integración (ALADI) por el apoyo para su formulación.
El plan se basa en cuatro pilares que abordan las temáticas de coordinación de estrategias a nivel nacional y regional, con enfoque de género; acceso oportuno y sostenible a alimentos inocuos y nutritivos; ampliación de los programas de alimentación escolar priorizando una atención a todas las formas de malnutrición, desde la subalimentación hasta la obesidad y, finalmente, la estabilidad en la producción y enfrentamiento oportuno a los problemas que presenta el cambio climático.
Pero más allá de la declaración política de la CELAC, resulta importante que los gobiernos de la región implementen políticas rurales acordes con esas declaraciones y sea esta la oportunidad para promover mayor inversión estatal y privada en este sector de la economía.
