Análisis previo al inicio de una explotación ovina

Al igual que lo que sucede en otros tipos de explotaciones pecuarias, la producción ovina debe estar enmarcada en la triada salud-nutrición-genética para que gracias a su implementación se cuente con un plantel productivo y rentable económicamente. Gran parte del éxito en el manejo de una producción ovina se fundamenta en el acopio y el análisis de la información, es así como el manejo de registros de salud y de indicadores productivos, al igual que la correcta identificación de los animales y el seguimiento periódico de su desempeño, son ejes fundamentales.

La infraestructura con la que se cuenta en el plantel debe permitir segregar animales, establecer grupos de acuerdo a edades, sexo y etapa productiva, realizar pesajes y manejo clínico y sanitario, de tal forma que se garantice la seguridad física y sanitaria tanto de los animales como de los operarios. Esta infraestructura en gran parte va a estar determinada por el sistema de explotación (intensivo, semi intensivo, extensivo). Antes de aventurarse a adquirir materiales y a disponer de recursos para la construcción de encierros, es importante contar con un diseño adecuado que permita estimar costos y número de animales que se pueden albergar; sólo de esta forma se hace un mejor uso de los recursos y se obtienen números financieros más favorables. Es frecuente conversar con productores que afirman que de comenzar de nuevo hubieron diseñado otro tipo de encierros, estas experiencias son válidas y enriquecedoras. Consultar y asesorarse primero es el paso más correcto.

La elección de la raza que se va a ingresar a la explotación está determinada por las características productivas y zootécnicas de cada raza, por las condiciones medioambientales con las que cuente la finca donde vamos a ubicar la explotación y por el objetivo final de la producción (carne, lana o ambos). Razas ovinas, existen cualquier cantidad (por ejemplo, Katahdin, Suffolk, Hampshire, Merino, Blackface, Dorper, Blackbelly, Corriedale, Romney Marsh, Dorper, Texel, Pelibuey), lo importante es hacer la correcta selección de la raza y de los pies de cría.

La selección de la raza está, dentro de muchos otros factores, también determinada por la disponibilidad de cantidad y calidad de alimento con el que contamos en nuestra explotación, es claro que razas como Dorper son muchos más exigentes que otras como Pelibuey o Blackbelly. La nutrición de ovejas, reviste un artículo aparte, pero por ahora hacemos mención de que puede estar conformada básicamente por gramíneas, leguminosas, sal mineralizada, concentrado y buena disponibilidad de agua limpia.

Por último, un aspecto fundamental, que lamentablemente y por lo general, es visto sin el suficiente análisis por parte del productor, es la existencia y el comportamiento del mercado de ovejas y sus subproductos. Recordemos que el mercado de ganado y subproductos bovinos no es el mismo del ganado ovino, así que definitivamente este último requiere un poco más de análisis e información. La anterior reflexión debe hacerse bien sea que se venda carne, lana o genética. Para el primer caso es importante ubicar compradores de corderos en pie o en canal (comercializadores, frigoríficos, restaurantes) y, si el emprendimiento empresarial lo permite, procurar unir y controlar todos los eslabones de la cadena productiva, para así lograr mayor rentabilidad. Es indiscutible que la utilidad neta del emprendedor en la producción ovina difiere si su producto final es un rack de cordero acompañado por una copa de vino Shiraz servido en un exclusivo restaurante o si su producto final es un cordero de 25 kg en pie vendido al comercializador más cercano. Un análisis similar se debe hacer si el objetivo es producir lana, máximo cuando las fibras sintéticas han cooptado parte del mercado textil a nivel mundial. Por último, el negocio de la genética en ovejas está influido a su vez, y en gran medida, por el good will del criador, por las razas y el mercado de las mismas y por las premiaciones que sus ejemplares logren en las pistas de las diferentes ferias ovinas.

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