Árboles en nuestras fincas: Samán
El Samán (Samanea saman) es un árbol grande, dominante, de copa grande y simétrica, que se distribuye desde América Central hasta el norte de Suramérica, y cuyos individuos normalmente se encuentran aislados en los potreros de las fincas. Las condiciones naturales óptimas de la especie son suelos arcillosos con buen drenaje, altitud de 0 a 1500 msnm, régimen de lluvias de 600 a 2500 mm y temperatura de 15 a 35oC. Se trata de un árbol que puede llegar hasta los 50 m de altura, con copa extendida en forma de sombrilla suportada por ramas horizontales. Tiene hojas grandes y bipinnadas y hojas de color rosa pálido.
Puede utilizarse como árbol de sombra, ya que además de las ventajas que ofrece su tamaño, sus foliolos se cierran por la noche, lo que permite que el agua pase a través hasta la cubierta herbácea a sus pies. Es una especie arbórea rica en taninos, que resiste el desrame y puede mantenerse a la altura que se requiera.
Las vainas de esta especie son un importante suplemento como forraje para el ganado, especialmente en época seca. Las vainas tienen una pulpa dulce y nutritiva que es altamente digestible (40% digestibilidad) y son muy palatables para el ganado bovino, caprino, ovino y porcino. Representan además una importante fuente protéica (12-18%), de carbohidratos y minerales.
Estos árboles son una fuente importante de madera comúnmente utilizada para hacer cercas, muebles, paneles y todo tipo de construcción.
Fuente: OFI-CATIE