Como parte de una estrategia de innovación y desarrollo implementada desde el gobierno nacional en materia de genética, el ministro de Agricultura, Ganadería y Pesca, Carlos Casamiquela, encabezó una reunión del Programa argentino de prueba de reproductores bovinos de leche (PROAR) para analizar los avances de la iniciativa.
«La recuperación de la capacidad genética bovina con proyección, requiere del Estado un rol central», manifestó Casamiquela, quien estuvo acompañado por el subsecretario de Lechería, Arturo Videla y el subsecretario de Ganadería, Jorge Dillon. Por su parte, el subsecretario de Lechería, Arturo Videla, remarcó que «es un programa que establece una Política de Estado para que perdure en el tiempo, asegurando la continuidad del mismo en el mediano y largo plazo, y generará un impacto nacional e internacional de significación».
En este marco, la comisión directiva del programa constituida por representantes de ACHA, LaUniversidad Nacional del Centro de la Pcia de Bs As y CABIA, le presentó al Ministro los avances, y acordaron la puesta en marcha para Marzo de 2015. Dentro del programa participarán, 30 toros jóvenes que inseminarán a aproximadamente 30 mil vacas. Por lo que el programa distribuirá 100 mil dosis de semen artificial por año, equivalentes al 4% del total de semen artificial que se utiliza en el país.
l PROAR se creó en septiembre de 2013, en el marco del Programa Nacional de Lechería, con el objetivo principal de lograr mayor productividad de los rodeos lecheros en el país. Impulsa la creación de una industria de genética nacional con capacidad de exportar a todo el mundo, herramienta fundamental para generar vacas más eficientes y busca la consolidación del liderazgo técnico argentino a nivel regional.
«El Ministro en esta reunión nos garantizó la continuidad del programa en el 2015, porque va a haber una masa de personas trabajando, alrededor de 200 tambos que van a prestar sus vientres, casi 100.000 bovinos para que sean probados y van a recibir asistencia técnica también», destacó Pablo Bergonzelli, secretario de Vinculación y Extensión de la Facultad de Ciencias Veterinarias de Tandil, de la Universidad Nacional del Centro de la Provincia de Buenos Aires (UNCPBA).
«Nos pareció muy importante que el ministro Casamiquela se interesara tanto por los detalles técnicos del programa y la especificidad de sus preguntas y las ideas que volcó en la reunión», afirmó Fernando Testa de la Comisión directiva de PROAR, en representación de Cámara Argentina de Biotecnología de la reproducción e inseminación artificial (CABIA).
Y agregó: «Lo más importante de todo es el conocimiento que vamos a ir adquiriendo en cuanto al desarrollo de una prueba de toros confiable en el futuro, así como también el productor comercial se va a beneficiar de algunos toros que vamos a poder proveerles a nivel nacional».
«Hay dos tipos de beneficios para los productores que están adentro del PROAR: por un lado, las dosis de semen alrededor del 20 – 30% del rodeo sin cargo, de estos toros que son los mejores seleccionados por genoma de Argentina, y por otro lado, se les va a bonificar los componentes del control lechero y la calificación de las vacas, además de capacitarlos en datos técnicos específicos», amplió Juan José Ysrraelit, de la Asociación Criadores de Holando Argentino (ACHA).
El PROAR tiene como ejes fundamentales verificar la calidad de la genética en los bovinos para mejorar la producción de los sectores lechero y vacuno, junto a la agregación de valor en origen, creando una industria de producción de genética, de impacto local y regional, desarrollando nuevos mercados. Argentina cuenta con un millón ochocientos mil vientres para pruebas de progenie que serán comparados con sus contemporáneos nacionales e internacionales. Además, es único en América Latina y relevante para un sector lechero cada vez más ávido de tecnologías que permitan aumentar la eficiencia de producción y durabilidad de los rodeos lecheros. El programa es el resultado de la interacción entre entes públicos, privados y académicos: (MAGyP, ACHA, CABIA y UNCPBA), para el desarrollo de actividades tecnológicas, de investigación y de capacitación como ocurre en los países más desarrollados.
Con una asignación total de $ 19.639.600, imputable a los créditos del Programa Nacional de Lechería, ejecutable durante 72 meses, el PROAR impulsa la creación de una industria de genética nacional con capacidad de exportar a todo el mundo, herramienta fundamental para generar vacas más eficientes y busca la consolidación del liderazgo técnico argentino a nivel regional.