Calentamiento global, mosquitos y enfermedades infecciosas
El calentamiento global es un riesgo para la salud pública. Una de sus consecuencias es la presentación de enfermedades infecciosas.
En años recientes los climatólogos identificaron una tendencia al alza en la temperatura global. Se espera que para el año 2100 haya un incremento generalizado de 2.0 ˚C. Estos cambios en la temperatura global pueden afectar la introducción y diseminación de enfermedades infecciosas en territorios donde antes no habían sido reportadas.
El incremento en la temperatura hace que mosquitos, garrapatas y otros insectos transmisores de enfermedades infecciosas, migren hacia regiones que no habían ocupado anteriormente. En efecto, la presentación de enfermedades transmitidas por mosquitos, como la malaria, el dengue y el virus Chikungunya, está altamente determinada por el calentamiento global.
Este fenómeno afecta directamente la transmisión de este tipo de enfermedades, al cambiar el rango geográfico de los mosquitos e incrementar las tasas de reproducción y de picaduras de los mismos. Se sabe además que, a mayor temperatura, pueden disminuir el periodo de incubación del agente infeccioso que transmiten.
Esta situación es la que se ha venido presentando con la aparición del virus Chikungunya en Colombia, el cual en la actualidad genera alerta epidemiológica en gran parte de los departamentos de la Costa Caribe y los Santanderes. El fenómeno de El Niño y las mayores temperaturas asociadas a éste, generaron el escenario ideal para que esta enfermedad infecciosa exhibiera tasas de dispersión como las actualmente reportadas.
Así las cosas, el calentamiento global no es solo materia de estudio para ambientalistas y climatólogos. No cabe duda que el análisis del papel del clima en la presentación de enfermedades infecciosas es tarea interdisciplinaria: médicos, climatólogos, biólogos y científicos sociales deben interactuar para formular estrategias de prevención. Pero a nivel local hay mucho por hacer.
Por ejemplo, en el interior de fincas es importante conservar reductos de bosque y fuentes de agua. Otras acciones preventivas incluyen pintar techos de blanco, disponer adecuadamente los desechos de la finca y, para evitar la transmisión del virus del Chikungunya, usar mosquiteros, controlar la acumulación de agua donde los mosquitos puedan ovopositar, y mantener peces (por ejemplo, mojarras o kois) en lavaderos para ejercer un control biológico.