¿Cómo son los caballos?
Los caballos son animales que sobreviven en condiciones naturales gracias a su capacidad de huir y patear a sus depredadores. La emoción dominante en los caballos es a todas luces el miedo y esto está principalmente mediado porque son en esencia animales presa, herbívoros y que pastorean.
En los caballos la visión es el sentido más importante para sobrevivir, ya que un movimiento rápido les indica peligro inminente y necesidad de huir lo antes posible. Pero si un caballo es arrinconado y no puede escapar su respuesta será patear a quien lo esté amenazando.
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Los mustangs salvajes viven en pequeños grupos. Un semental vive con 4 o 6 yeguas, mientras que los otros machos conforman grupos en los que procuran buscar dominancia para poder llegar a conquistar hembras de otros grupos. La razón del tamaño de los grupos de caballos obedece a su naturaleza de huir al sentir amenazados, ya que esto no requiere conformar grupos con un gran número de animales para sentirse protegidos.
Los caballos son animales muy inteligentes con una gran corteza cerebral. Incluso son capaces de cooperar entre sí para su propio beneficio: ¿quién no se ha percatado que los caballos ubican sus cabezas cerca a la cola de sus congéneres para espantarse las moscas de la cola?
Es además un animal muy cercano a la sociedad humana. Ha acompañado al hombre en la conquista de nuevos territorios y, muy a la usanza de los perros, les encanta complacer al ser humano.
Los caballos y el miedo
Cuando un potro nace, lo hace acompañado de miedo. Es por esto que desde el día de su nacimiento se debe socializar con el ser humano. En la medida en que el potro ve que la yegua disfruta de los cuidados del hombre (por ejemplo, cepillado, comida) aceptará la presencia de los humanos en su vida. Pero responderá huyendo ante movimientos bruscos y agresivos.
Los caballos desarrollan algo que se conoce como «memoria del miedo», de tal forma que pueden recordar una experiencia abusiva en el pasado. Es por esto que las primeras experiencias a las que sea expuesto un caballo (uso de la silla, del cabezal y de la cuerda) deben ser siempre gentiles.
Para quien maneja habitualmente caballos es importantísimo conocer las señales de comportamiento que denotan miedo en un caballo. Un caballo medioso mueve su cola rápidamente, mantiene la cabeza elevada, presenta sudoración profusa y en condiciones extremas echa sus orejas para atrás. Ante este tipo de exhibición lo más sensato que se debe hacer es dejar que el caballo se calma para que no peligre la integridad física de la persona ni del animal.