Manejo de un accidente ofídico

Familia	Género	Nombres comunes
Viperidae	Bothriechis sp.	Víbora de tierra fría, de pestaña, colgadora
	Bothrocophias sp.	Guata, jergón, cuatro narices
	Bothrops sp.	Mapaná, taya X, rabiseca, jararacá
	Porthidium sp.	Patoco, patoquilla, veinticuatro, sapa
	Bothriopsis sp.	Rabo de chucha, loro, rabiseca, mapaná
Elapidae	Crotalus sp.	Cascabel
	Lachesis sp.	Verrugosa o rieca
	Micrurus sp.	Coral, rabo de ají
	Pelamis sp.	Serpiente de mar

Es claro entonces que si somos mordidos por un boa (Boa constrictor) o una cazadora no tenemos riesgo desde el punto de vista de intoxicación, pero es prudente acudir a atención médica para de esta forma prevenir cualquier infección generada por la mordedura. Existen algunas claves para poder identificar serpientes venenosas de no venenosas, por ejemplo, las serpientes venenosas tiene múltiples escamas en la cabeza, son por lo general de cabezas más grandes y tienen fosas termoreceptoras (por eso a las del género Bothrocophias sp. se les conoce como cuatro narices). Para el caso particular de las corales (Micrurus sp.), es importante detallar que los anillos sean completos, que el orden de los colores digan la palabra RANA (es decir, rojo amarillo negro rojo) y que hayan anillos negros impares entre dos anillos rojos, de no ser así se tratará de una falsa coral que no es venenosa. Por lo general, los campesinos son conocedores de las serpientes venenosas, luego, en caso de ser mordidos, son ellos los que de primera mano pueden orientarnos sobre la letalidad de las serpientes. Algunas entidades estatales y privadas publican periódicamente trípticos o cartillas informativas, los cual vale la pena adquirirlos para de esta forma facilitar la identificación de serpientes venenosas ante una eventualidad.

Las serpientes, a pesar de ser consideradas histórica y culturalmente, como animales indeseados, cumplen una función ecológica importante, especialmente en lo que se refiere a la regulación de las poblaciones naturales. Precisamente, ellas controlan las poblaciones de roedores, anfibios y reptiles en nuestras fincas. Es por esta razón, que un buen finkero debe saber convivir con ellas, implementando medidas para evitar cualquier encuentro y accidente ofídico.

Con el fin de disminuir la probabilidad de accidentes ofídicos, es importante que después de crecientes de ríos o en épocas de fuertes de lluvias, se tenga especial cuidado al caminar ya que es en estos momentos donde las serpientes salen en búsqueda de refugio. Sugerimos también usar botas de caucho cuando ingresamos a algún potrero con hierba alta y evitar en lo posible caminar por la noche sin iluminación alguna. Es clave considerar también que las serpientes pueden buscar refugio para regular temperatura en sitios de almacenamiento como silleros, bodegas y baños, por lo que es preciso tener especial cuidado en estos sitios.

Cuando se es mordido por una serpiente en lo posible se debe capturar la serpiente, esto porque de su identificación depende el tratamiento a iniciar. La sintomatología difiere de la especie de serpiente venenosa por la que se es mordido, como se puede observar en la siguiente tabla:

Familia/Género	Sintomatología
Viperidae	Edema, dolor intenso e inmediato, ampollas que pueden ser hemorrágicas, sangrado, hipotensión, oliguria o anuria, aborto en mujeres embarazadas
Crotalus sp.	Dolor, edema, ptosis palpebral (inflamación),coloración oscura de la orina, dolor muscular
Lachesis sp.	Edema, dolor, hemorragia, epistaxis (sangrado por boca y nariz), sangre en la orina, hipotensión, ampollas, necrosis
Micrurus sp.	Síntomas neurológicos. Visión borrosa, ptosis palpebral, sialorrea (saliva en abundancia por la boca), dificultad de tragar y para caminar.

Nuestros animales también pueden sufrir de accidentes ofídicos, es relativamente común escuchar reportes de muertes de perros o de ganado ocasionado por serpientes venenosas. La sintomatología es muy similar a la observada en humanos. Cuando un bovino es mordido por una serpiente venenosa, y en caso de encontrarse el animal muerto, el cadáver por lo general evidenciara sangrado por boca y nariz, desprendimiento de la piel y de los cascos. En perros la acción que podemos tomar es usualmente mucho más oportuna que en humanos, así que el tratamiento en este caso es el mismo que se menciona a continuación.

Determinante son los primeros auxilios que se le deben prestar a una persona víctima de un accidente ofídico. Lo primero es tranquilizar a la persona, limpiar la herida, inmovilizar el miembro o parte afectada y procurar cargar a la persona. En ningún caso se debe intentar succionar el veneno de la herida, esto porque quien lo hace puede absorber el veneno a través de las encías y ser así víctima también de la intoxicación. Tampoco se sugiere realizar cortes sobre las partes afectadas ni aplicar torniquetes. Lo que sí se puede administrar es antihistamínicos para disminuir los efectos anafilácticos producto de la mordedura y trasladar a la mayor brevedad a la persona afectada al centro de salud más cercano.

Existen en el mercado sueros antiofídicos que se pueden adquirir en el mercado, algunos de ellos incluso no requieren refrigeración, de tal forma que en aquellas zonas de alta probabilidad de accidente ofídico, lo más prudente es tener un suero antiofídico en nuestras fincas como parte del botiquín de emergencias.

El tratamiento en todos los casos de accidente ofídico debe ser realizado por un médico y preferiblemente en condiciones hospitalarias. El tratamiento está basado en la administración de suero antiofídico para neutralizar el veneno circulante, además del tratamiento de soporte para las manifestaciones locales y sistémicas. Existen varios tipos de suero antiofídicos:

Polivalente: se utiliza para tratamiento de accidentes provocado por serpientes de la familia Viperidae  (mapaná), Crotalus sp. (cascabel) y en algunos casos por reacción cruzada por el género Lachesis (verrugosa).

Monovalente: este tipo de sueros son usados exclusivamente para la mordedura de un solo tipo de serpientes y puede ser antibotrópico (contra la mordedura de mapaná, taya X, cuatro narices), anticrotálico (contra la mordedura de cascabel), anilachésico (contra la mordedura de verrugosa, surucucú) y anticoral (contra mordedura de corales género Micrurus).

Los laboratorios productores de suero antiofídico, muchos de estos brasileros (micrúrico), mexicanos y colombianos, anexan al producto indicaciones de dosificación. Sin embargo, a continuación presentamos una tabla de dosificación sugerida por el Instituto Nacional de Salud.

TRATAMIENTO ESPECÍFICO PARA ACCIDENTE OFÍDICO
		Severidad del Accidente Ofídico
Clasificación	Tipo de suero	Leve	Moderado	Grave
Biotrópico	Polivalente. Disueltas en 300 ml de solución salina. Infundir en 30 minutos	4 ampollas de suero antiofídico	6 a 8 ampollas de suero antiofídico	10 a 12 ampollas de suero antiofídico
Lachésico	Suero antiofídico polivalente. Disueltas en 250 ml de solución salina. Infundir en 30 minutos	8 ampollas	10 a 12 ampollas	20 a 25 ampollas
Crotálico	Suero antiofídico polivalente. Disueltas en 250 ml de solución salina. Infundir en 30 minutos	8 ampollas	12 ampollas	20 ampollas
Micrúrico	Suero antielapídico (Brasilero). Disueltas en 300 ml de solución salina.Infundir en 30 minutos	10 ampollas	10 ampollas	15 a 20 ampollas

Este mismo criterio de dosificación lo podemos implementar para el tratamiento de animales víctimas por un accidente ofídico.

Finkeros.com, el portal de las fincas.

Fuente: Instituto Nacional de Salud