Marsupiales en nuestras fincas: Chucha de oreja blanca

Chucha de oreja blanca, chucha, fara, runcho, comadreja, raposa, zorro hediondo, zorro mochilero, comadreja overa o simplemente zarigüeya, como se le quiera llamar, este marsupial suramericano es un habitante común de nuestras fincas. La chucha de oreja blanca (Didelphis albiventris) puede llegar a pesar 2 kg y medir 40 cm de largo, su cuerpo es café oscuro, negro o una mezcla de negro y blanco. Su cara es blanca con una franja negra desde la nariz hasta las orejas. La base de la cola es negra y el resto es blanquecino. Poseen cola prensil.

Su distribución es estrictamente suramericana, Colombia, Venezuela, Brasil, Perú y Argentina son países que reportan su presencia. En Colombia habita las tres cordilleras, en bosques húmedos y páramos hasta los 3900 msnm. A las fincas usualmente ingresan buscando aves de corral y frutos cultivados. En climas cálidos, tienen una especial predilección por la papaya. Sus hábitos son nocturnos, arbóreos y terrestres y, por lo general, se encuentran en solitario (las hembras usualmente cargan las crías tanto en el marsupio como en el lomo).

Para evitar muertes en aves de corral basta con mantener los animales en corrales que eviten el ingreso de las chuchas. Adicionalmente, la presencia de perros en fincas o en cercanías de cultivos, por lo general las ahuyenta. Por ser una especie silvestre, es reservorio de varias enfermedades infecciosas (por ejemplo, leptospirosis), luego se sugiere no consumirlas ni entrar en contacto con la especie ni con sus secreciones.

Foto: Luis Moreno

Fuente: Morales et al., 2004. Mamíferos terrestres y voladores de Colombia. Guía de Campo. Bogotá, Colombia. 248p.    

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