Turismo en fincas en Colombia
El turismo rural es una de las principales alternativas para descanso y vacaciones de los colombianos. Las fincas turísticas y las casas campestres representan una excelente opción durante las diferentes épocas del año en las que la premisa es desconectarse de lo cotidiano de las urbes.
La búsqueda de la ruralidad
El canto de los alcaravanes acompaña la llegada de los turistas a una de las fincas turísticas de Hato Corozal, Casanare. A lo lejos, una miríada de garzas y corocoras levanta el vuelo mientras cautiva la atención de los presentes. Años atrás estas aves no eran más que testigos del continuo trasegar del ganado por esta sabana que parece ser devorada por el intenso azul del cielo. Pero los tiempos han cambiado.
A pesar de que no se cuenta con aire acondicionado ni agua caliente, y de que el servicio de energía eléctrica está disponible solo durante cuatro horas, la afluencia de turistas es cada vez mayor en estas extensas fincas que tradicionalmente se han dedicado a la cría y levante de ganado, pero que ahora ven en el turismo rural una alternativa económica rentable. ¿Qué hace que una persona acostumbrada a las comodidades de la ciudad se escape por unos cuantos días a la precariedad del campo?
La búsqueda de la ruralidad. Esa parece ser la respuesta. A pesar del desbordado desarrollo de los centros urbanos, aún se conservan regiones cercanas a las grandes ciudades, y lejanas en muchas ocasiones, que se constituyen en verdaderas alternativas turísticas para el disfrute de escenarios naturales y paisajes rurales.
En muchos países el ambiente rural es depositario de su herencia biológica, histórica y cultural. Es donde pareciera estar la esencia de los pueblos. Donde todo empezó. Fue en el campo donde se dieron las batallas decisivas por la libertad de los países de la región latinoamericana. De allí mismo salieron los nuevos habitantes de las incipientes urbes de comienzos del siglo pasado. Son campesinos los que hoy producen la comida que llega a la mesa de sus conciudadanos y los que históricamente han sufrido el abandono de los gobiernos de turno.
Situación lamentablemente de la que es consciente José Antonio Ocampo, economista y líder de la Misión Rural, instancia encargada de estructurar el portafolio de políticas públicas para el campo colombiano. El diagnóstico que, sobre la situación del sector rural en Colombia, ha hecho el equipo de expertos que dirige es, en términos generales, desolador.
Sin embargo, a pesar de la baja competitividad del sector agropecuario colombiano y las condiciones comerciales que con frecuencia desfavorecen al productor, para Ocampo una de las alternativas viables para el campo es el desarrollo del turismo rural. No en vano, a manera de sentencia anticipada, frente a académicos y funcionarios públicos afirmó con vehemencia que “lo rural en Colombia no debe estar restringido a lo agropecuario. No todas las fincas deben estar destinadas para la ganadería o la agricultura”.
El desarrollo del turismo rural
Las conclusiones del estudio impartido por la Misión Rural eran de esperarse. El turismo rural surge como una respuesta a la inestabilidad de los mercados agropecuarios. Ejemplos hay varios en toda Latinoamérica. Sucedió con la crisis del cacao en Tabasco, México, con el desplome de los precios de la lana en la Patagonia argentina y del café en Colombia.
En efecto, la crisis del grano de los años 80 causó un problema social y económico en el eje cafetero, pero también contribuyó a que fincas y haciendas cafeteras evolucionaran hacia la oferta turística que generó empleo y estabilidad económica en la región. Gracias a que el turismo rural ofrecía mayores oportunidades a la región que las actividades agropecuarias tradicionales, este emprendimiento fue apoyado por el gobierno colombiano y se enfilaron esfuerzos para trabajar hacia la capacitación para la prestación del servicio turístico y mejorar en los estándares de calidad en la oferta turística.
Este viraje de la actividad productiva de una finca hacia la oferta de turismo rural es bastante esperanzador. Y lo es precisamente porque el turismo es la industria que mayor número de empleos genera en el mundo. Se estima que 1 de cada 15 empleos se da gracias al turismo. El turismo en efecto es uno de los sectores de la economía con mayor crecimiento a nivel mundial.
Tan solo en el departamento del Quindío, el turismo genera más de 1.000 empleos directos y 4.000 indirectos. En la actualidad más de 300 fincas están vinculadas a la oferta de turismo rural en la región. En paralelo se han desarrollado pequeñas empresas que ofrecen alimentación, artesanías, cafés, servicios turísticos asociados y transporte.
Es un hecho que la actividad turística en el Quindío ha brindado enormes beneficios a la comunidad. Esto gracias a que existe una gran identidad cultural lo que ha llevado a que los propios habitantes de la región hagan la gestión turística y garanticen la seguridad del visitante.
El crecimiento del turismo rural se ha dado también gracias a la búsqueda de nuevos destinos turísticos por parte del mercado y a iniciativas del gobierno. En Colombia, por ejemplo, a partir de la puesta en marcha de la ley Emiliani en 1983, el turismo en fincas se incrementó gracias al traslado remunerado de algunos días festivos. En otros países el apoyo del gobierno tuvo incluso un mayor alcance.
Costa Rica es un buen ejemplo. En el país centroamericano el turismo aporta más del 10 por ciento del Producto Interno Bruto gracias a que este modelo se financia con la sobretasa de la gasolina. Esto ha llevado a que muchos productores agropecuarios dediquen parte de sus fincas al turismo rural. Como afirma Randall García, director del Instituto Nacional de Biodiversidad de Costa Rica, este modelo permite que “un campesino pueda vender muchísimas veces el paisaje de su finca”.
Nuevos destinos turísticos
En Latinoamérica se han desarrollado experiencias exitosas de turismo rural. Las estancias en Argentina, las haciendas en México, las fincas cafeteras en Colombia y las posadas ecoturísticas en Costa Rica son algunas de estas. Pero tanto el portafolio como los destinos cada vez se amplían más.
Como se puede observar en el siguiente mapa, en Colombia los municipios donde la oferta de turismo rural es mayor son aquellos cercanos a las principales ciudades del país. Es así como poblaciones como Anapoima y Girardot en Cundinamarca y San Jerónimo y Sopetrán en Antioquia son grandes receptores de turistas ávidos de desconectarse del ambiente urbano para recargarse de energía en una finca turística. A su vez, como se puede ver en el siguiente gráfico, los departamentos con más turismo rural son aquellos donde existe cercanía de los grandes centros urbanos.
Son varios los motivos que llevan a que los habitantes de las ciudades escojan una finca como su destino vacacional. Desde descanso absoluto hasta la posibilidad de practicar deportes al aire libre y reencontrarse con actividades de campo figuran entre las preferencias de aquellos que se inclinan por el turismo rural. Ver encuesta.
Avances tecnológicos
Aparte de la necesidad de invertir en infraestructura, de garantizar la seguridad de los turistas y de ampliar la oferta de paquetes turísticos para el fortalecimiento del turismo rural, los avances tecnológicos son necesarios para el desarrollo y crecimiento de este sector.
Es por esta razón que en paralelo con la ampliación de la oferta del turismo rural, y quizás como respuesta a las necesidades de los usuarios, aparece en el mercado Finkeros.com. Esta es la más innovadora y efectiva plataforma tecnológica para que los propietarios y administradores de fincas turísticas y casas campestres, no solo de Colombia, sino también de Argentina, Costa Rica y México, ofrezcan sus servicios y administren sus reservas con total eficiencia.
Finkeros.com le permite también a los usuarios encontrar la finca de su preferencia y reservarla con total seguridad gracias a las herramientas implementadas y a los protocolos sugeridos. Además los usuarios tienen la posibilidad de calificar el servicio de las fincas turísticas y constituirse en reguladores del mercado.
Para mayor comodidad de los usuarios, recientemente Finkeros.com lanzó al mercado la aplicación para móviles. Esta aplicación permite ponerse en contacto con el administrador de una finca turística y reservarla desde la comodidad de un teléfono celular. Descárgala acá.
Hola, he estado buscando esto un tiempo y por fin he podido despejar las dudas, gracias