Gobierno Uribe no favoreció a la ganadería colombiana
La política internacional entre el 2002 y el 2010 pareciera haber afectado económicamente a la ganadería colombiana. Ganaderos reconocen las falencias que sucedieron en el gobierno pasado.
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Son muchas las razones de la historia reciente de la ganadería colombiana que han causado pérdidas para este importante sector de la economía del país. Dentro de este largo memorial de agravios que se le debe pasar a la Federación Nacional de Ganaderos de Colombia (Fedegan) y a los gobiernos de turno, se encuentran la falta de inversión en ciencia y tecnología, evidentes problemas en extensionismo rural, establecimiento de ganadería en tierras no aptas, elevados costos de transporte y de insumos, inseguridad en el sector rural y la sempiterna corrupción estatal.
Sumado a esto, en un reciente conversatorio con ganaderos al que asistió esta revista, se escucharon voces que sugieren que durante el gobierno de Álvaro Uribe Vélez, contrario a lo que sostiene Fedegán y el uribismo más radical, se afectó seriamente a la economía de los ganaderos colombianos.
«Desde que a Uribe le dio por pelear con Chávez por allá en el 2007, y se cerraron fronteras con Venezuela, el bajón de precios del ganado en pie fracturó muchas ganaderías de este país», sostiene un tradicional ganadero de los llanos orientales que pidió guardar su nombre. Bajo esta misma línea de pensamiento, un reconocido ganadero antioqueño, que también pidió reserva de su identidad, asegura que cuando la frontera con Venezuela estuvo abierta, Hugo Chávez era considerado por muchos ganaderos como «el mejor presidente que tuvo Colombia».
Este tipo de opiniones, válidas por venir de donde vienen, permiten concluir que la dinámica de los mercados deben priorizarse por encima de las doctrinas políticas, ya que de ella dependen el bienestar de los pueblos y la salud de las economías sectoriales. Se constituyen además en lecciones del pasado para tener en cuenta en estos agitados tiempos políticos en los que todo el país vive.
